Calvados

Calvados es una prestigiosa bebida espirituosa de manzana con origen en la región de Normandía, Francia. Su historia se remonta al siglo XVII cuando los monjes benedictinos comenzaron a destilar manzanas para crear un licor único. El nombre "calvados" proviene de la región donde se produce.

La producción de calvados comienza con la cuidadosa selección de manzanas, utilizando solo las mejores variedades. Las manzanas se trituran y el jugo resultante se fermenta durante varias semanas, convirtiendo los azúcares en alcohol. Después de la fermentación, el líquido se destila en alambiques de cobre para obtener un espíritu claro y puro.

Lo que distingue al calvados es su proceso de envejecimiento. El licor destilado se traslada a barricas de roble, donde madura durante un período variable, que puede ir desde unos pocos años hasta varias décadas. Durante este proceso de envejecimiento, el calvados desarrolla una complejidad y adquiere notas frutales, florales y amaderadas. El aroma y el perfil de sabor del calvados pueden variar según las manzanas utilizadas y las técnicas de producción empleadas.

El calvados se puede disfrutar solo como digestivo, servido ligeramente calentado para realzar sus aromas. También es un ingrediente muy apreciado en cócteles, añadiendo elegancia y profundidad a las bebidas mixtas. Además, el calvados se utiliza en la cocina para infusionar salsas, postres e incluso platos salados como carnes o quesos.

Hoy en día, el calvados es considerado un producto de calidad excepcional y refinamiento, que representa el arte y la tradición de Normandía. Su producción está regulada para garantizar autenticidad y calidad. Apreciado por conocedores de todo el mundo, el calvados sigue cautivando con sus sabores ricos y su legado centenario.